El pasado domingo nos desplazábamos a Maracena para continuar con nuestra particular singladura en la competición autonómica. La jornada no pudo ser más propicia para los nuestros, mantenían las buenas sensaciones demostradas ante el Medina Lauxa , recuperaban su autoestima, vencían con oficio y solvencia su encuentro ante un buen rival y recuperaban la tercera plaza debido a la derrota de La Cañada. Todo en uno. Al margen, los padres, ahí los padres, preparaban una comilona campestre en un santiamén en la puerta de la Ciudad Deportiva del Maracena. Como diría mi amigo Andrés el Real Jaén y su “tupperware”