El pasado viernes disputábamos,
como queda reflejado en la crónica anterior, un buen partido, pero desde el
punto de vista clasificatorio era totalmente intrascendente. Sin embargo, hubo
un gesto que merece destacarse como muestra o definición de lo que se debe entender
por compañerismo.
“El compañerismo y la confianza
surgen de forma natural cuando se respetan la disciplina y los buenos valores”.
Esa definición de Compañerismo le viene como anillo al dedo al protagonista de esta historia: al directo y sufridor Carlos y a Juan como cómplice y sufridor igualmente.
Carlos, dentro de sus habilidades deportivas, al margen de ser un extraordinario guardameta, para mí, el mejor de la generación del 99, es un fabuloso tenista, habiendo vencido en muchos torneos provinciales. El viernes tenía que disputar las semifinales del campeonato provincial. De vencer, representaría a la provincia en el andaluz. Pero Carlos no se presentó y perdió, con casí total seguridad lo hubiera conseguido y con ello la oportunidad de defender a nuestra provincia y disfrutar de un campeonato de Andalucía.
No se presentó por no abandonar a sus compañeros. Simplemente Gracias en nombre de todo.Gestos como éste hacen que todo sea más fácil.
No hay comentarios: